Fular

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El fular es sin lugar a dudas el portabebés más versátil de todos. Una tela de diversos largos que gracias a su suavidad y elasticidad nos permite llevar a nuestro bebé muy cerca de nuestros cuerpos. La comodidad y seguridad de un fular difícilmente puede ser igualada por otro tipo de portabebés.

Los fulares Indajani son del tipo de fular rígido, es decir su tela no es elástica y por lo mismo el fular no se vence con el peso del bebé cuando éste crece. Por esta razón el fular rígido Indajani sirve perfectamente para portear a nuestro bebé o niño durante toda la etapa del porteo, es decir, desde recién nacido hasta que deseemos dejar de usarlo.

Nuestro fular para bebés está disponible en diez tallas o diez medidas de la tela. El largo del fular depende de la complexión o talla del porteador y de los tipos de nudos que busque realizar. En el siguiente enlace puedes encontrar una Guía de Tallas para poder elegir el fular para bebé más conveniente para ti.

Nuestros fulares los tejemos básicamente en dos tipos de tela: fular de tafetán y fular de sarga.

Fular de Tafetán. El tafetán también es conocido como tejido plano y se trata del ligamento más sencillo en el que se pasa un hilo de urdimbre por un hilo de trama. Es el tejido en el que están elaborados los rebozos tradicionales. Nuestra tela de tafetán es ligera, fresca y muy manejable. Esto hace del fular rígido de tafetán un portabebés ideal para climas cálidos. Algunos de los fulares de tafetán son rematados con rapacejo. El rapacejo es una serie de nudos con que se terminan los rebozos tradicionales mexicanos.

Fular de Sarga. En este caso son fulares rígidos tejidos en diferentes ligamentos como sarga cruzada, sarga diamante y sarga espiguilla, por mencionar sólo algunos. La sarga es un tipo de tejido que no estira en horizontal ni en vertical, sino que estira en forma diagonal, lo que la hace altamente recomendable para su uso en portabebés. La principal diferencia entre fulares de sarga y los de tafetán es que los fulares de sarga son más gruesos, más mullidos o acolchados por lo que el fular de sarga es ideal para climas fríos.